domingo, 29 de marzo de 2020

Luz o sombra.

Quien tiene a Cristo está en la luz - Protestante digital

Al levantarme cada día, Dios me da la oportunidad de decidir muchas cosas, una de ellas es qué voy a ser? Si seré luz o seré sombra es una de esas decisiones que debo tomar. Pero definamos a ver qué significa esto. De manera secular, la luz es una forma de energía que ilumina las cosas, las hace visibles y se propaga mediante partículas llamadas fotones; también se puede definir como la luz natural o solar que podemos percibir. Y la sombra es una Imagen oscura que proyecta un cuerpo opaco sobre una superficie al interceptar los rayos de luz, o también se puede definir como una parte de un espacio a la que no llega la luz, especialmente la del sol.

Si lo vemos desde la perspectiva cristiana a la luz de la palabra de Dios podemos decir que La luz de Dios es su palabra, por la cual se revela, y por la que no sólo revela los peligros que existen, sino que además actúa como lámpara para mostrar el verdadero camino (Sal 119:105).

De la misma forma podemos encontrar en la palabra el significado de la oscuridad o el sinónimo de ésta (tiniebla), veamos: El camino de los impíos es como las tinieblas, no saben en que tropiezan. (Prov- 4:19); también en Génesis 1:2 nos dice: “Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

Generalmente, solemos definir la luz como cuando encontramos una salida a algún problema, o cuando podemos solucionar alguna situación o cuando encontramos como salir de algún problema. De la misma manera podemos definir la oscuridad como cuando no puedes pensar en una solución para poder resolver algo, o como cuando te sientes encerrado o no podemos ver o tener solución de alguna situación o para poder resolver alguna cosa.

Así mismo recuerdo que cuando en mi pueblo se iba la luz, las personas todas salían a los balcones para poder apreciar la luz de la luna y las estrellas y se paraban automáticamente todas las cosas que se estaban haciendo de manera cotidiana en casa; y cuando retornaba la electricidad, era como si hubiésemos ganado un premio, o como si nos hubieran dado algo muy esperado, recuerdo que hasta aplaudíamos (el dominicano es muy emotivo y creativo, ¡sí que lo es!), y retornábamos a todas las actividades que para nosotros eran normales. Por eso recuerdo tanto el episodio de cuando el huracán George, fueron más de 60 días sin energía eléctrica en casa, a mí me pareció una eternidad.

Pero qué bueno que existe una luz que no se va, que siempre esta, que es eterna, esa es la luz de Cristo; su palabra es capaz de alumbrar nuestras vidas por completo, de llenar hasta el último rincón de nuestras vidas y alumbrarlo con un resplandor inconfundible, que brilla tanto que no la podemos esconder. Lámpara es tu palabra para mis pasos, luz en mi sendero; (Salmos 119:105).

Así también nos explica la palabra de Dios qué es y cómo se está en tinieblas, por ejemplo en 1 Juan 2:11 da un ejemplo de como se está en tinieblas, veamos: “Pero el que aborrece a su hermano, está en tinieblas y anda en tinieblas, y no sabe adónde va, porque las tinieblas han cegado sus ojos.”, creo que está muy claro el cómo podemos estar en tiemblas y como podemos hacer para estar en luz.

Hoy, qué decides tú? Estar en tinieblas o en luz. Recuerda que la decisión es tuya y de nadie más; nadie puede hacer ni puede tomar esa decisión por ti; levántate y busca ser luz para tu casa y para los demás; recuerda que la luz no se puede esconder, y que cuando la luz está, las tinieblas deben disiparse.

Busca la respuesta dentro de ti. Enciende esa luz de amor, justicia y perdón que llevas dentro y compártela con los demás. Vive este día rodeado de la luz de Cristo, sonríe por estar vivo y ruega por misericordia y perdona para ti y para tu prójimo. Recuerda que Dios es bueno todo el tiempo, feliz día de parte de tus amigos de www.oloracielo.blogspot.com y bendiciones.

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