¿Urgente o importante?

Esta pregunta puede utilizarse para analizar cualquier parte de nuestras vidas, sea espiritual, social, de familia, labora… cualquier situación. Es interesante saber qué es realmente importante, y que es realmente urgente.

El sentido de lo urgente, según un artículo del año 2016 por Pedro González, nos hace el siguiente comentario:

“Dice el diccionario que urgente es aquello que se puede definir como “lo que corre prisa, que no puede ser retrasado”, y que de ahí nace la urgencia como una calidad de lo urgente. Que algo se asocie a la necesidad o falta apremiante de lo que es menester para algo, se ha vuelto tan común que se ha vulgarizado.”

Estoy de acuerdo con el comentario de que lo hemos vulgarizado, pues le hemos o le estamos dando un uso inadecuado a este término. Casi siempre, y más en estos tiempos, la gente en la calle o donde quiera que nos movemos, hace uso inadecuado del termino definido. Todos tenemos tanta urgencia, que nos volvemos tan vulgares, como el término mismo. Las personas ya no prestan atención a lo que les rodea, no les importa chocar al otro, atropellarlo, lanzar improperios a una persona…, porque entendemos que nosotros tenemos mucha urgencia en hacer lo que queremos hacer o en llegar a donde queremos llegar y que el prójimo llegan incluso a estorbarnos.

Qué triste es ver en las calles de mi país, como los choferes del transporte público y privado, atropellan de forma verbal y física a las personas que les rodean, ya no les importan las señales de tránsitos, las señalizaciones ni las ven, no le dan importancia a los peatones, ni a los animales. Estamos viviendo como en un matadero “sálvese quien pueda”, y no es que las autoridades no hagan su trabajo, es que ya los imprudentes son mucho más.

Cuando me siento a conversar de este tema con cualquier persona, los desacuerdos llegan enseguida, ya que el otro entiende que si los demás lo hacen, eso les da permiso y autoridad para hacerlo también, y encuentran tantas frases para justificar sus malas actuaciones que a veces es mejor ni hablar del tema, y lo peor de todo es que ellos creen que tienen la razón. Y a pesar de eso, dicen que es que en este país no hay ley, ni hay quien la haga cumplir. Pero si las autoridades aplican la ley, entonces dicen que se les están violando sus derechos constitucionales, ¡qué horror!, que contradicción.

A pesar de todos los esfuerzos que hagan nuestras autoridades, si no logramos tener el consenso de la población, y la voluntad general del pueblo, para realizar los cambios que tengamos que realizar, nunca podremos lograr obtener los resultados que queremos, ni podremos organizar un sistema social que sea capaz de generar confianza y seguridad, a todos los niveles.

Podríamos decir que debemos comenzar en casa a realizar estos ejercicios y debemos enseñarles a nuestros hijos lo que significa la urgencia y lo que representa lo importante, pero justo allí muchas veces no conocemos la diferencia de ello. Los tiempos cada vez son más cortos, es verdad, y eso científicamente está comprobado y bíblicamente está sustentado en Mateo 24:21-22

21 Porque habrá una gran tribulación, como no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá jamás. 22 Si no se acortaran esos días, nadie sobreviviría, pero por causa de los elegidos se acortarán. (les recomiendo leer el capitulo completo).

Hay mucha tribulación en estos días, muchos terremotos, enfermedades que trascienden más allá de las fronteras internacionales, hambre, rumores de guerra, mas dice la biblia, no es el fin. Pero a cauda de los elegidos los días del regreso del Señor se acortaran.

Es verdad que hay que vivir cada día como si fuera el ultimo, pues no sabemos hasta cuando estaremos en esta tierra, pero a lo que se refiere esta frase es, a que si tienes problemas con alguien debes subsanarlo hoy, debes pedir perdón HOY, debes reconciliarte con tu hermano HOY, debes ayudar a tu prójimo HOY, debes hacer las cosas bien HOY, piensa que mañana puede ser muy tarde…

Ni tu ni yo sabemos cuánto tiempo nos queda, pero lo que yo, particularmente se, es que quiero pasar un tiempo de calidad aquí, mientras todavía respiro y me muevo. Tiempo de calidad con mi familia, con mis seres queridos, con mis compañeros de trabajo, de estudio, con mis vecinos, conmigo misma… es importante identificar pues, lo que es urgente y lo que es importante. Es tu vida espiritual importante para ti?, entonces cuídala, esmérate cada día por ser un mejor ser humano, sin mirar que tan mal lo están haciendo los demás, debes hacerlo bien tú.

Dios te regale un día lleno de bendiciones y satisfacción personal. Recuerda es importante amarte y amar  a los demás, urgen cambios en la sociedad para poder mejorar nuestro entorno, comencemos por nosotros mismos. Feliz inicio de semana. Bendiciones.

¿Por qué tengo que complacerte?

Veamos que significa la complacencia, esta es definida como la tolerancia excesiva, o también como la satisfacción o placer con la que se hace o recibe algo. Esto es interesante, el significado de esta palabra si es hacia nosotros es buena (eso creemos todos), pero cuando se usa de forma deliberada, excesiva y constante hacia los demás puede dañar y hasta causar la muerte de una persona. Sí, es cierto, no es que este exagerando; Cuando una persona no puede complacer un vicio es capaz de matar o de matarse. Entonces esto es algo con lo que no se puede jugar. Debemos aprender a conocernos, y a conocer a los demás. A este mundo no venimos a complacer a los demás, y aunque nos duela o no nos sintamos satisfecho con este comentario, es la verdad.

No venimos a eso, ni a complacer de forma permanente a otros, ni a satisfacer todos nuestros propios deseos. Es más podemos hacer una prueba con personas que tengan alguna dependencia de algo, cualquier cosa, puede ser de comida, bebida, medicamento, o incluso de presencia de personas en sus vidas. Si intentas cambiar ese hábito, los primeros días sentirás que te duele demasiado, y encontraras todas las justificaciones necesarias para poder volver a hacer lo que te da placer. Incluso cuando no puedas hacerlo en público, lo harás a escondidas y empezaras a culpar y a alejarte de las personas que quieren ayudarte.

El hacerse dependiente de algo o alguien es como entregarles las llaves de nuestra vida (mente, cuerpo y corazón). Estamos consciente de lo que significa ser complacientes?, deberíamos saberlo, determinando esto estaríamos contribuyendo a la reducción del abuso contra las personas, animales o cosas.

La única dependencia que es aceptable y necesaria para el ser humano es la de Dios. Y por desgracia todavía hay personas que no le conocen, que no han experimentado su presencia en sus vidas y otros que no se atreven a presentarles las bondades de esa dependencia a los demás.

Cristo, cuando se estuvo en tiempos difíciles, dependió totalmente de su padre Dios (Jehová) o en tiempos de abundancia, alegría y bendición, también fue capaz de hacer de la dependencia de Dios su mejor aliada.

¿Cómo podemos entregarnos por completo a Él?, Pues debemos en oración pedirle a Dios que tome el control de nuestras vidas, que nos ayude a morir al yo (como decía Pablo) y nos de las fuerzas que necesitamos para pasar por este mundo pero a no ser dependientes de este mundo. No será nada fácil al principio, pues nuestras mentes y cuerpos están corrompidos por las cosas de este mundo, pero a medida que decidamos dejar a Dios actuar en nosotros veremos como todo fluirá de la mejor manera posible. El universo conspira a nuestro favor en el momento que decidimos entregar nuestra vida a Dios.

Pero  no te quedes solo con la oración, debes actuar con fe (lee Hebreos 11), sabiendo que eres hijo del Dios altísimo y que El estará contigo todos los días y hasta el fin del mundo (como dice en Mateo 28:20).

Prueba depender de Dios y hacer su voluntad y tendrás bendiciones hasta que sobren y abunden como dice en Malaquías 3:10. Hoy te invito a que pruebes con Dios, elige estar bajo su protección y cuidado, a cambio dale tu corazón, tus deseos, pensamientos y redirecciona tus acciones. Veras que bien se siente y el placer que sentirás no te dañara.

Dios te bendiga, te guarde y te proteja hoy y siempre. En oloracielo queremos orar por ti, déjanos tu comentario y descansa en los brazos de Jesucristo.

¿Crees en Dios o le crees a Dios?

No es lo mismo creer en Dios que creerle a Dios. ¿Qué entiendes tú por esta acepción? ¿Cómo contestarías tú a esta pregunta?

Tal vez ni siquiera dediques tiempo a hacer este ejercicio, quizás no te parezca interesante, puede ser que sólo leas esta reflexión y ni siquiera la compartas con alguien más. Lo cierto es que todos creemos en Dios, ya que entendemos que hay un ser superior que nos creó y nos cuida, otros lo entienden como la persona que nos castiga si hacemos algo mal, o la que puede vernos en todos los lugares, y escuchar todo lo que decimos y hasta lo que no decimos.

Bueno todo lo antes dicho tiene algo de verdad. Cierto es que Dios nos escucha, nos ve, nos ayuda y hasta nos puede dar nuestros castigos de vez en cuando, veámoslo como un padre amoroso. Pero la cuestión es si le creemos a Él o creemos en El?.

Yo, particularmente le creo a Dios, el (como dice en su palabra) no es hombre para mentir ni hijo de hombre para que se arrepienta. Cuando lo he necesitado ha estado ahí, incluso si no lo necesito (según mi humanidad); es mi refugio, mi fortaleza, mi pronto auxilio en tribulación, mi consuelo,  mi luz, mi guía, mi soporte, es el que me da fuerzas cada día para continuar, el que me llena de esperanza, el que me alienta, también es el que me hace ver cuando estoy en un error.

Cualquiera cree en Dios, pero hoy te exhorto a que le creas a Dios.  Bendecido día, y recuerda compartir las reflexiones con tus amigos.

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¿Qué tiempo dedicamos a nuestras familias?

"Las personas que dedican poco tiempo a construir relaciones familiares saludables viven en su círculo de no control. En lugar de tomar cuidadosas decisiones acerca de cómo responden cuando conversan con otro miembro de la familia, culpan a este por empezar la pelea y se sienten justificadas para ofenderlo. Se trata de individuos que contestan de manera reactiva en vez de optar por ser proactivos. No aprovechan el espacio de tiempo entre lo que la otra persona ha dicho y su contestación, y no consideran las consecuencias y el impacto que tendrán su respuestas en su relación." (Esperanza para las familias de hoy, pag. 65).

El tiempo que debemos dedicar no es necesariamente 24 horas literales, ya que en estos tiempos existe la necesidad de salir a trabajar, a cumplir un horario que posiblemente sea mayor a cuatro horas. Y en la mayoría de los casos deben salir a trabajar mama y papa, porque los gastos  y los compromisos son muchos para una sola persona.

Podríamos pasar la mañana completa justificando la salida de papa y mama a trabajar para llevar el sustento a la casa. Podríamos pasar todo un día justificando a quien pertenece la responsabilidad de traer el sustento a casa. Podríamos pasar varios días intentando justificar porque existen hogares uniparentales…

Pero lo cierto es que queramos o no debemos salir y esto implica ausentarnos físicamente de nuestros hogares y de la presencia de nuestros hijos y familiares. Pero así como dice el primer párrafo, sería muy interesante aprender a construir relaciones familiares saludables, no solo para poder tener el control, sino para enseñarles a nuestros hijos como lo deben hacer cuando les toque la responsabilidad de formar una familia aparte.

Algo muy importante que toca ese texto es la manera en la que debemos contestara la otra persona, debemos ser proactivos no reactivos, debemos aprender a escuchar, debemos aprender a analizar, debemos aprender a ver las posibles consecuencias de nuestras acciones antes de actuar. Con todo esto creo que podemos comenzar a construir relaciones saludables en nuestro círculo familiar, laboral, de amigos, y en cualquier lugar donde nos encontremos.

Pongamos en práctica estos consejos y probemos las bondades de una buena práctica de comunicación saludable a nuestro alrededor. No permitamos que los malos pensamientos, los prejuicios, las malas interpretaciones o las malas expresiones se apoderen de nuestro círculo familiar, recordemos que somos obreros de Cristo Jesús, y que como tal debemos practicar las buenas normas que hemos aprendido a través del estudio de las sagradas escrituras.

No dejemos de luchar y esforzarnos por ser mejores cada día, esto incluye que seamos capaces de formar relaciones saludables y sobre todo duraderas. La enemistad o los malos entendidos no deben tomar parte en nuestras vidas. Seamos claros, y cuando no estemos seguro de haber escuchado algo, preguntemos, pero hagámoslo con humildad, como el que quiere aprender algo. Con esto llegaremos a ser buenos ejemplos para las personas que nos rodean y atesoraremos coronas en el cielo.

Que Dios todo poderoso te colme de bendiciones y te regale un día lleno de paz y esperanza. Visítanos también en las redes sociales como oloracielord, y comparte el mensaje de esperanza.

Bendiciones.

No hables mentiras. Frase típica de los padres.

¿Qué es la mentira? Una mentira es una declaración realizada por alguien que sabe, cree o sospecha que es falsa en todo o en parte, esperando que los oyentes le crean, de forma que se oculte la realidad o la verdad en forma parcial o total.

San Agustín distingue ocho tipos de mentiras:

• Ø  Las mentiras en la enseñanza religiosa;
• Ø  las mentiras que hacen daño y no ayudan a nadie;
• Ø  las que hacen daño y sí ayudan a alguien;
• Ø  las mentiras que surgen por el mero placer de mentir;
• Ø  las mentiras dichas para complacer a los demás en un discurso;
• Ø  las mentiras que no hacen daño y ayudan a alguien;
• Ø  las mentiras que no hacen daño y pueden salvar la vida de alguien,
• Ø  y las mentiras que no hacen daño y protegen la "pureza" de alguien.

Tomás de Aquino, por su parte, distingue tres tipos de mentiras:

• ·         la útil,
• ·         la humorística
• ·         y la maliciosa.

Según Tomás de Aquino, los tres tipos de mentira son pecado. Las mentiras útiles y humorísticas son pecados veniales, mientras que la mentira maliciosa es pecado mortal.

El tipo más grave de mentira es la calumnia, ya que con esto se imputa siempre a algún inocente una falta no cometida en provecho malicioso.

Paradójicamente en estos tiempos ya no podemos diferenciar lo que es la mentira de lo que es la verdad, y mucho menos conocemos las clasificaciones de la misma. Esto es un problema mayúsculo, pues practicamos tanto el uso de la mentira que nos llegamos a creer que es verdad; como dice el viejo dicho “tanto se repite una mentira, que se convierte en verdad”, bueno no es que se convierta en verdad “literalmente”, es justo que lo que quiero explicar, no podemos distinguirla.

Y mucho más grave se torna el asunto cuando nos creemos que existen mentiras de colores, esos colores son los que pueden hacer que de mentira se pase a calumnia.

En estos tiempos muchos dirán que es difícil sostener una mentira, ya que gracias a la tecnología todo puede ser transmitido en tiempo real y se pueden desenmascarar a los mentirosos y a los culpables. Pero que sucede cuando las personas que deben juzgar o clasificar los hechos no conocen el significado de la mentira ni de la verdad?

No le digas a tu hijo que diga una mentira por ti. Asume cada una de tus responsabilidades, se honesto. Si no sabes el significado de la honestidad, aquí te lo comparto:

• Honestidad: es la cualidad de honesto, adjetivo con los significados de «decente, decoroso, recatado, pudoroso, razonable, justo, probo, recto y honrado». De esta última sinonimia puede deducirse la asociación de honestidad y honradez, virtud o cualidad del hombre honrado y signo de «rectitud de ánimo e integridad en el obrar» (luego escribiré un artículo referente a este tema).

Está relacionado con la palabra verdad que es la coincidencia entre una afirmación y los hechos, o la realidad a la que dicha afirmación se refiere o la fidelidad a una idea, tan simple como esto, pero tan difícil de ejecutar (aparentemente).

Regalémosle a esta sociedad, individuos honestos, razonables, justos, rectos, honrados, decorosos, recatados, con pudor, que puedan ser ejemplo de verdad. Que actúen, piensen y sientan como para Dios. Jesucristo dijo “Yo soy el camino, la verdad y la vida…”, entonces busquemos conocer más de él, estudiemos más la biblia, practiquemos la bondad y la honestidad; Hagamos con el buen proceder que la palabra mentira se convierta en un pasado mitológico al cual no tengamos que recurrir nunca. Probemos la aprobación de Dios en cada acto de nuestras vidas y disfrutemos de los resultados de una vida plena, bendecida, llena de paz, gozo y armonía.

Comparte este artículo con tus seres queridos, y demostrémosle con nuestras propias acciones, que podemos tener un mundo mejor. Oloracielo.blogspot.com te desea un excelente y bendecido día.

La familia.

Indiscutiblemente el núcleo de la sociedad es la familia, compuesta en principio por el esposo y la esposa, que después se amplía con la llegada de los hijos.

En el libro El hogar cristiano, p. 156, leemos: “El círculo del hogar debe considerarse como un lugar sagrado, un símbolo del cielo, un espejo en el cual nos reflejemos. Podemos tener amigos y conocidos, pero no hemos de entrometernos en la vida del hogar”.

¿Cómo podemos aplicar este ejemplo de servir los unos a los otros en el hogar? Esposo y esposa sirviéndose mutuamente y ambos sirviendo a los hijos. Hermanos sirviéndose los unos a los otros, y todos sirviendo a los padres. Haciendo eso, todos estarán reflejando el ejemplo de Cristo y sirviendo a Dios en el hogar.

El servicio en el hogar debe ir mucho más allá del simple hecho de hacer las tareas domésticas cotidianas preestablecidas o no de la casa. Servir en amor, como Jesús lo hacía, significa estar siempre listo a hacer algo para ayudar a los demás. Significa buscar oportunidades para hacer a alguien más feliz. El padre y esposo es quien, cuando al llegar cansado después del trabajo, lava la loza de la cena para que la esposa tenga un descanso de buena gana y con amor, y así todos puedan pasar más tiempo juntos. El hijo que corre a ayudar a descargar del auto las bolsas o fundas cuando los padres llegan del mercado, aunque ninguno pida ayuda. La esposa que planea y prepara la cena especial para la familia, aun cuando no hay nada para celebrar.

El ejemplo de servicio que Jesús nos dejó incluye mucho más que acciones; incluye sentimientos y actitudes de ayuda, de servicio, de amor al prójimo. Jesús no solo servía, sino que servía con bondad, paciencia y amor.

“La mayor evidencia del poder del cristianismo que se pueda presentar al mundo es una familia bien ordenada y disciplinada. Esta recomendará la verdad como ninguna otra cosa puede hacerlo, porque es un testimonio viviente del poder práctico que ejerce el cristianismo sobre el corazón” (El hogar cristiano, p. 26).

Sin embargo, lo contrario también es verdad: “La influencia de una familia mal gobernada se difunde, y es desastrosa para toda la sociedad. Se acumula en una ola de maldad que afecta a las familias, las comunidades y los gobiernos” (El hogar cristiano, p. 27).

Preguntémonos hoy:

ü  ¿cómo hemos vivido realmente como familia y qué tipo de influencia hemos sido para los que nos rodean.

ü  ¿Qué tipo de testimonio está siendo nuestro hogar para el mundo?

ü  ¿Será que estamos recomendando la verdad o siendo una influencia desastrosa?

Meditemos seriamente en esto, y quiera Dios que encontremos las respuestas correctas para mejorar nuestro círculo familiar y así contribuir a reparar la grieta mundial que está sufriendo lo que llamamos hoy “familia”.

Feliz y bendecido día te desea oloracielo.blogspot.com

¿Qué es la comunicación?

Sobre esto podríamos decir tantas cosas, comenzando por la definición que nos da la RAE (Real Academia Española), que dice que la comunicación es el medio a través del cual tanto personas como animales obtienen o comparten información sobre su entorno. También podríamos definirlo como algo mas sencillo, diciendo que es el intercambio de información entre dos seres vivos.

El caso es que la comunicación es algo esencial en la vida, ya que no fuimos creados para vivir solos. Desde el principio Dios nos dio, o nos asignó, o nos colocó (como quiera decirlo) una pareja o semejante para que pudiéramos interactuar. Es ese interactuar de suma importancia, pues podremos comunicar lo que sentimos o necesitamos y de paso obtener lo que queremos. Es por esto que debemos tener sumo cuidado al comunicarnos con los demás.

En un libro muy interesante titulado “Esperanza para las familias de hoy”, encontré una frase muy interesante, importante y poderosa, justo para estos tiempos en los que comunicarse efectivamente da tantos problemas. Dice: “Quienes procuran comunicarse bien con sus seres queridos, disfrutan de unas magníficas relaciones familiares. Si piensas en las personas de tu familia con las que más te identificas, admitirás fácilmente que son las que te hacen sentir a gusto por la manera en que te hablan y te escuchan”.

Las negritas y palabras subrayadas que aparecen en el texto anterior fueron colocadas de esa manera por mí, por la razón de que quiero enfocarme en esas palabras para la reflexión de hoy.

Comunicarse y comunicarse bien  no significan lo mismo. El comunicarse bien hará que cumpla el propósito del significado de la palabra comunicación que ya di en el primer párrafo; La simple comunicación puede que no sea efectiva o que no cumpla su propósito u objetivo. Por ejemplo, si quieres comunicarle a la persona que va a tu lado que está entorpeciendo tu paso (por la razón que sea), veras que no tienen la misma respuesta cuando le dices amablemente que necesitas pasar (aunque no le des los detalles de esa necesidad), que cuando le gritas que se quite de tu camino, ¿verdad?

Pues así mismo ocurre con todo lo que queremos comunicar, hay una frase que mi madre repite mucho y que tiene mucha sabiduría cuando se dice, pero que aporta mucha satisfacción cuando se logra hacer, que es “Se cazan mucho más moscas con miel que con vinagre”. Es verdad, cuando utilizamos frases dulces y bien formuladas, e incluso cuando utilizamos el tono de voz correcto, podremos alcanzar aquello que dice la frase. Pero lamentablemente, la mayoría de nosotros nos detenemos a ver con qué tono y con cuáles palabras nos dicen las cosas a nosotros, pero no vemos ni escuchamos cómo las decimos nosotros a  los demás, irónico no?

Para crear magníficas relaciones y sentirnos identificados con las personas que nos comunicamos, y sentirnos bien y hacer sentir bien a nuestro prójimo, es importante la forma o manera en la que hablamos y en la que nos hablan a nosotros.

La comunicación efectiva debe ser de doble vía, debemos dar y debemos recibir, pero si aplicamos los principios bíblicos y estudiamos cuidadosamente el método de Jesucristo al dirigirse a los demás, habremos encontrado un tesoro maravilloso que nos traerá alegría cada día de nuestras vidas, sí, cada día, y me preguntaras ¿también en las adversidades? Y te contestaré que sí, es allí donde da mas satisfacción. Tener una buena comunicación y aplicar los principios bíblicos es la mejor manera de comenzar a transformar nuestra manera de vivir.

Por lo tanto también podemos decir que, según la RAE, la definición de comunicación, no es más que la emisión de señales mediante gestos, señas, sonidos, etc., con la intención de promulgar o dar a conocer un mensaje. Para que exista la comunicación es necesario que el receptor del mensaje disponga de las habilidades necesarias para decodificarlo y posteriormente interpretarlo. Deseo pues, que en este año 2020 aprendamos a comunicarnos mejor, a interpretar correctamente los mensajes y a emitir mensajes claros, con sabiduría, y que los mismos nos hagan disfrutar de relaciones más sanas (ya sean familiares, de espos@s, de amig@s, de compañer@s de trabajo, en fin las relaciones en sentido general).

Que disfrutes este primer martes del año 2020 y que dentro de nuestras metas para este año este incluido el ser y hacer felices a las personas que nos rodean, recuerda la vida pasa muy aprisa, aprovecha cada día.

Bendiciones de oloracielo.blogspot.com para ti.

Todo pasa!...

Y como todo en la vida pasa, también ya pasó el año 2019.

Al culminar este año 2019 dejamos atrás muchas cosas buenas y malas; al igual que podemos decidir comenzar otras, en ese ejercicio de inicio de año debemos preguntarnos ¿qué dejamos inconcluso en el 2019?, ¿Qué hicimos que nos llena de satisfacción?, ¿qué hicimos que no nos hizo feliz?, ¿lo que hicimos agradó a Dios?, ¿Cuáles herramientas necesito para comenzar mis nuevos proyectos?...

Y sería una lista un poco extensa de preguntas que deberíamos de hacernos, aunque me imagino que ya hiciste tu lista de propósitos para este año 2020. Si es así estas a tiempo de reformular, el objetivo final es que podamos decir al final hasta aquí me ha ayudado Dios y lo logre.

No temas fracasar, témele a no intentarlo. Si tienes tus metas trazadas y el camino señalado es porque sabes a dónde vas, pues el que no sabe dónde va, simplemente ya llegó.

Feliz inicio de año 2020, y recuerda que estas a tiempo de hacer tu lista de propósitos o de reformularla, a partir de hoy solo nos resta comenzar a trabajar para lograr las metas trazadas.

Hoy es el primer jueves del año, respira, sonríe, actúa.

Se feliz. Bendiciones.