lunes, 18 de marzo de 2019

¿Quieres ser bienaventurado?

Salmos 41:1-2
“Bienaventurado el que piensa en el pobre;
    En el día malo lo librará Jehová.
Jehová lo guardará, y le dará vida;
Será bienaventurado en la tierra,
Y no lo entregarás a la voluntad de sus enemigos.”

Las bienaventuranzas de nuestro Dios esta prestas para cada uno de nosotros, listas, preparadas, dispuestas, como usted lo quiera expresar; En definidas cuentas ellas estas ahí para ti y para mí. Pero como todo en la vida y en las escrituras, tiene una condicionante; En este caso la condicionante se refiere a lo que nosotros hacemos con el prójimo. ¿Acaso no nos da mandato la oración modelo de Jesús e incluso en los mandamientos, acerca de lo que debemos hacer con nuestro prójimo?  (Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores. Mateo 6:12), ¿Acaso no vino Jesús a esta tierra a darnos ejemplo de amor al prójimo? (Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis. Juan 13:15)…

Entonces, no sé porque razón somos tan desalmados a la hora de actuar para con nuestro prójimo, y les doy algunos ejemplos: * vamos en la autopista, y en lo único que pensamos es en adelantar al que va delante nuestro a como dé lugar, como si fuera una carrera de automóviles; * Queremos tenerlo todo, sin reparar en pensar que existen personas muriendo por falta de agua y comida; * Tenemos tanta ira dentro, que queremos hacer justicia con todos con nuestras propias manos; * Vivimos con tan poco tiempo que todo lo nuestro debe ser de prioridad, sin importar a quien esto afecte; Y así podríamos mencionar tantos casos que nos pasaríamos el día en este solo tema.

Pero qué bueno que Jesucristo vino a este mundo a darnos ejemplo y a mostrarnos como podemos o como debemos tratar a nuestro prójimo.

Recordemos que Jesucristo como hijo de Dios vino y nos mostró cómo hacerlo, y nos ayuda a través de su palabra a recordarlo todos los días de nuestras vidas. Así que hoy recordemos que ser diferentes no significa ser inferior, ni ser menos que nadie. Seamos amables, corteses, educados, bondadosos, generosos, tengamos gratitud para con los demás, recordemos que: “Bienaventurado el que piensa en el pobre; En el día malo lo librará Jehová. Jehová lo guardará, y le dará vida; Será bienaventurado en la tierra, Y no lo entregarás a la voluntad de sus enemigos.”


Que Dios nos bendiga y nos ayude a adquirir todas estas cualidades y a ponerlas en práctica con nuestros semejantes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Sea tu si, si y sea tu no, no.