Nunca es tarde para empezar.

 Cuando quieres emprender un proyecto, casi siempre esperas a que sea inicio de mes, de semana, de año... nos gusta empezar de la manera tradicional como nos han enseñado que empiezan las cosas. Tradicionalmente, nos han enseñado que la semana comienza el día lunes; pero tengo para decirte que nos enseñaron mal. Si vamos a la biblia, aprenderemos que el primer día de la semana (según nos dice la propia biblia) es el domingo. Pero sin embargo no nos aventuramos a emprender o a comenzar un domingo, porque ese día la gente lo toma para descansar (claro, a menos que sea un negocio de comida, bebida, baile, etc).

Al único día que Dios le puso nombre fue al sábado, a este día lo santifico, y lo guardo, y nos lo regalo para que fuese un día especial del recordatorio de la creación y del creador; de hecho el mismo Jesucristo guardo el sábado y los apóstoles también. A veces se nos hace muy difícil hablar del día sábado y de cómo debemos guardarlo; incluso si te pones a buscar información, encontraras poca información, pero, créeme que sustanciosa. La información más importante sobre este tema es la que nos relata la misma biblia en el libro del Génesis.

Es por esto que es tan importante leer la biblia; no nos quedemos con la información que escuchamos y nada mas, recuerda que la mayoría puede estar equivocada. Cuando leo la biblia es como cuando me doy un buen baño con agua bien fría en un día muy caluroso.

Esto sucede con nuestro cerebro cuando le alimentamos con la palabra de Dios, que sirve para redargüir, enseñar e instruir en justicia. Utiliza esta información para alimentar tu vida espiritual; la misma hay que alimentarla diariamente tal como alimentamos nuestro cuerpo físico. Y te puedo asegurar que hoy es un buen día para comenzar. Inténtalo; comienza a darle el mejor alimento a tu espíritu, y no te olvides de tu cuerpo. Recuerda, nunca es tarde para empezar.

Dios pueda bendecirte y te regale un día lleno de paz.