miércoles, 13 de noviembre de 2019

Dios quiere lo mejor para nosotros.



Cada día tenemos la oportunidad de tomar decisiones, que queramos o no, son capaces de cambiar el rumbo de nuestras vidas.
En el capítulo 15 del libro 1ra de Samuel vemos la historia de la desobediencia de Saúl al mandato de Dios y las consecuencias de la misma. La decisión de desobedecer le costó a Saúl el trono y lo llevó a la destrucción. Eligió el camino que creía que era el mejor, pero como sabemos, el resultado no valió la pena.
Podemos aprender de sus errores, o podemos pasar desapercibida sus enseñanzas, eso también es tomar una decisión. La obediencia parcial es, en realidad, desobediencia. Y cualquier desobediencia cae en la categoría de rebelión, lo cual es pecado.
A diario, al igual que Saúl tenemos muchas opciones las cuales requerirán de nuestras decisiones. Tomando en cuenta que somos igual de vulnerables que cualquier otro ser humano, debemos tener presente que “Dios quiere lo mejor para nosotros”.
La obediencia es un verdadero adorno en el carácter del que dice ser cristiano; Si hoy te ves en la  necesidad de tomar una decisión, recuerda que Dios está contigo; Que la palabra de Dios sea tu guía y que le obedezcas de todo corazón.
Recuerda:
1Samuel 15:22 dice: “Y Samuel dijo: ¿Se complace Jehová tanto en los holocaustos y víctimas, como en que se obedezca a las palabras de Jehová? Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios, y el prestar atención que la grosura de los carneros.”

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Sea tu si, si y sea tu no, no.