lunes, 21 de octubre de 2019

Meditemos…


Ageo 1:6-8 

6 Sembráis mucho, y recogéis poco; coméis, y no os saciáis; bebéis, y no quedáis satisfechos; os vestís, y no os calentáis; y el que trabaja a jornal recibe su jornal en saco roto.
7 Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Meditad sobre vuestros caminos.
8 Subid al monte, y traed madera, y reedificad la casa; y pondré en ella mi voluntad, y seré glorificado, ha dicho Jehová.

El ser humano siempre está de aquí para allá afanado por las cosas del día a día, por el quehacer diario y nos olvidamos de lo más importante que es nuestra relación con Dios. Al final del día, muchas veces, reflexiono en esto: siembro mucho y recojo poco… y hasta digo “que cruel es la vida”, pero hoy quiero reflexionar en esto: “meditad en vuestros caminos (Ageo 1:7)”… quiero ver qué he hecho hasta hoy y que puedo hacer a partir de hoy.

Hay un himno que me gusta mucho, que en una de sus estrofas dice: ¿Qué estás haciendo por Cristo, mientras él vida te da?, sembrando estas su palabra, o te hayas durmiendo quizás..., es algo para realmente ponerse a meditar. Dios nos da tanto, cada día, pero nuestros afanes no nos permiten darnos cuentas de los afortunados que somos, ni del gran amor que tiene Dios y que dispensa a cada uno de sus hijos diariamente.

Meditemos ahora juntos en esto: Subamos al monte (tengamos una comunión muy estrecha con nuestro Dios, contémosle todos nuestros pesares, agradezcamos por los favores recibidos y hagamos pacto de amor con él), traigamos madera (mantengamos en nuestras mentes y corazones las promesas de nuestro Dios), reedifiquemos la casa (nuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, obremos conforme a esto), dejemos que Dios coloque su voluntad en nosotros y que sea glorificado su nombre, en el nombre de Jesucristo, Amen.

Que esta pueda ser nuestra oración en este día, y que tengamos la oportunidad y el deseo de compartirla con los  demás, que hagamos uso de esos dones maravillosos que Dios coloco en cada uno de nosotros y que podamos vivir y disfrutar este día como un regalo de Dios.

Que el Altísimo te sostenga y te bendiga.

Feliz inicio de semana laboral.

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