Libérate de ti.

¿Cuántas veces te has sentido que no puedes avanzar? Te preguntas ¿Por qué no veo la salida? O quizás solo quieras saber ¿Qué es lo que te pasa que no logras sentirte realizado?

Leí una vez en un libro de meditaciones que necesitamos ser liberados de nosotros mismos. Te preguntaras ¿Cómo así?, te cuento:

La meditación empieza con una frase de un Médico Psicólogo cristiano que dice “Debo desprenderme cada día de mi mismo para poder estar totalmente a disposición de los demás”. (Paul Tournier). Él se refería, en la meditación, a un caso que llego a él un día, de una señora que había sido referida por un colega amigo suyo al cual el admiraba muchísimo; extrañamente estaban pasando los días y el no veía la mejoría de su paciente, para él era algo importante pues quería hacer saber a su amigo Psicólogo que él era muy capaz profesionalmente.

Esto solo logro hacer que se sintiera ofuscado y que se sintiera que no avanzaba en su consulta con la señora. Y no fue hasta que   reconoció que se estaba enfocando demasiado en él y no en su paciente, y decidió confesarlo y orar por eso, cuando entonces empezó a ver los resultados en su paciente, y pudo lograr su objetivo que era ayudar a la señora.

Este mensaje es muy adecuado y refrescante para nuestros días. Debemos enfocarnos en ayudar a los demás y no en nuestro propio ser, eso era lo que quería expresar ese Psicólogo con la frase que les mencioné al principio. Esta parte sería el resultado de lo que Jesús nos exhorto cuando dijo: 

“Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. (Mateo 22:37-39)

El amor al prójimo es la cura para la mayoría de nuestros males, si, aunque no lo entiendas ahora, haz como Tournier, ponlo en oración y veras los resultados.

Dios te bendiga y te guarde, y que te brinde la oportunidad de experimentar los beneficios de ayudar a los demás.

Feliz jueves.