jueves, 14 de marzo de 2019

Manantial de verdad.

Es en la Biblia donde encontraremos todo lo que necesitamos para nuestro día a día; No importa que profesión ejerzas o que oficio desempeñes o que tan preparado creas estar sobre un tema. 

En estos tiempos es imprescindible que las familias tomen las riendas de sus relaciones y que colaboremos en la formación de jóvenes con valores. Actualmente las familias a nivel mundial se están desintegrando con tanta prisa que ya pocas son las posibilidades de que se constituyan en el futuro. Es cada vez menor el grado de responsabilidad que queremos asumir al momento de conocer a una persona.

Solo queremos experimentar y si no nos gusta lo dejamos. Es como cuando un niño va a una tienda de caramelos, ve uno y le gusta, ve el otro y le gusta más, el que puede lo compra, lo prueba y después se da cuenta de que hay otros dulces que también le llaman la atención, y también quieren probarlos; muchas veces si no tienen el dinero para comprarlo, dejan que otro lo compre y le piden o le quitan el dulce solo para probarlo o saber cuál es su sabor.

Esta es una realidad de la cual no estamos exentos como sociedad; Así como ha proliferado el tema de las redes sociales y que todos queremos estar en ellas, de esa misma manera queremos hacer y tener lo que los otros hacen o tienen.

Actualmente el punto de enfoque del enemigo de las almas son precisamente las familias. Ya nadie tolera nada en las relaciones matrimoniales y sin pensarlo mucho, tomamos las decisiones que para nosotros humanamente son las más fáciles, pero que tienen repercusión eterna.

Los núcleos familiares son la base de toda sociedad; y no podemos permitir que nuestros niños y jóvenes crezcan sin las herramientas necesarias para poder aportar a nuestra sociedad las cosas que nos mejoren o crear un ambienta mejor para poder vivir. Ellos son los futuros doctores, ingenieros, psicólogos, contadores, abogados, técnicos en refrigeración, militares, profesores, científicos, agrónomos, entre muchas otras más profesiones y oficio, pero por sobre todas las cosas, la mayoría serán padres y madres biológicos o de oficio, y tendrán la responsabilidad de dar de lo que tengan.

¿Y que tenemos nosotros para dar?. Podemos medir que tienen nuestros hijos? Qué le hemos dado?, Cuales son sus valores?, Que principios les hemos enseñado?, Como le homos enseñado a resolver los conflictos?, Nos respetan como padres?, Respetan a los adultos?, Cumplen sus deberes o solo reclaman sus derechos?....

La Biblia fue creada con la finalidad de permanecer ante los tiempos y mostrar cómo debe ser el comportamiento del ser humano en esta tierra, ¿cómo debemos manejarnos como personas?, ¿cuáles son nuestros límites?, ¿cuáles deben ser nuestros principios?, ¿quién es Dios y quien soy yo?, entre muchas otras cosas más.

Amigos, no permitamos que satanás nos arrebate la oportunidad que tenemos de mejorar nuestra sociedad, de vivir en un mundo mejor, de extender nuestros días en esta tierra y que esos días estén llenos de dicha y de paz. Hagamos nuestro mejor y mayor esfuerzo en contribuir para ser mejores personas, mejores padres, mejores hijos, mejores vecinos, mejores empleados, mejores supervisores, mejores amigos, mejores cristianos.

No dediquemos tanto tiempo a aquello que no va a contribuir con una causa colectiva, no seamos egoístas; No pensemos en satisfacer nuestras necesidades solamente, no miremos solo lo que queremos conseguir, analicemos bien para que no dañemos a los que nos rodean. Dios nos creó para que fuésemos felices y nos creó después de haber preparado todo un escenario para que pudiéramos cumplir nuestra misión, no sigamos dañando lo que tanto esfuerzo le ha costado a algunos mantener.

Seamos entes de bien, practiquemos la misericordia, la bondad y el perdón en todos los lugares que nos encontremos, no rebasemos en las carreteras por el simple hecho de rebasar y mostrar que mi carro corre más rápido, o con el pretexto de que llevo prisa, no juzguemos a aquellas personas que están en las calles solamente diciendo que son las consecuencias de sus acciones, pues a nosotros no nos falta mucho para padecer las consecuencias de nuestras acciones. Como dice en la palabra "Todo tiene su tiempo y todo debajo del sol tiene su hora"...

Eduquemos a nuestros hijos en valores, y no hay un mejor manual para aprender sobre esto que la Biblia, anda busca la tuya, ora pidiendo la dirección del Espíritu Santo para que te ayude a discernir lo que en ella está escrito y la fortaleza para poder practicarlo, y sobre todo, no olvides testificar con tu vida las maravillas que Dios ha hecho en ti y en tu familia a través de los años. Recuerda que Dios es bueno todo el tiempo y todo el tiempo Dios es bueno.

Bendecido día.


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