miércoles, 5 de diciembre de 2018

¿Pagar mal por mal? no lo creo...


En este día, quiero exhortarles mis amados, a que compartan la gracia de nuestro Señor Jesucristo con todas las personas que  les rodean. El tiempo es propicio para esto. Muchas personas en tiempos de navidad, se hacen sensibles a las palabras, sentimientos, emociones, más que en otros tiempos, es por eso que quisiera recordarles estas palabras del apóstol Pablo:
1 Tesalonicenses 5:15
Mirad que ninguno pague a otro mal por mal; antes seguid siempre lo bueno unos para con otros, y para con todos.

En cada una de las personas que nos rodean podemos ver el rostro de Jesús y actuar de la manera que Él lo haría en cada situación, dirigidos por el Espíritu Santo y bajo el poder de Dios podremos hacerlo. Algunas de las pautas a seguir para conseguir tener el éxito en este día serian:

Ver la presencia de Dios en medio de las dificultades. Cuando nos unimos a nuestros hermanos en la fe, podemos ayudarlos a desviar su enfoque de sus circunstancias y comenzar a ver sus pruebas como oportunidades para ser moldeados, para crecer y para descubrir lo que el Señor desee.

Involucrarse personalmente. La mejor manera de recibir exhortación es a través de encuentros cara a cara que permitan que la otra persona vea nuestra atención y preocupación. Además, al observar las reacciones, el discernimiento nos ayuda a entender los problemas y a percibir qué principios bíblicos aplicar.

Estar dispuestos a aprender. Al ayudar a otros a madurar, también debemos estar dispuestos a hacer cambios en nuestra vida, porque no podemos transmitir sabiduría a otros a menos que la persigamos nosotros mismos.
Y haciendo esto podremos ver el rostro de nuestro Dios y sentir su presencia. No desmayes hoy por hacer el bien, más bien haz el bien y no desmayaras.

Dios te guarde y te regale un día lleno de paz.


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