jueves, 29 de noviembre de 2018

¿Y ahora quien podrá defenderme?

¿Y ahora quien podrá defenderme?

En el libro de Zacarías 12:8 dice: En aquel día Jehová defenderá al morador de Jerusalén; el que entre ellos fuere débil, en aquel tiempo será como David; y la casa de David como Dios, como el ángel de Jehová delante de ellos.

En estos tiempo y hasta podríamos decir, en estos días, la situación en las calles de nuestro país (que es la que transitamos diariamente), nos encontramos con hechos y sucesos tristes, difíciles, estresantes, desgarradores y hasta inhumanos, y hasta esos hechos han endurecido el corazón de muchas personas, que ya no creen en las personas que se paran en los semáforos de las grandes avenidas de la ciudad, o los que encontramos en los parques, en los hospitales, y a veces hasta en las mismas instalaciones de nuestro trabajo. Esto es algo que nos había dicho la biblia desde hace mucho tiempo atrás en Mateo 24:12 “Y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará”; y entonces cuando llega ese momento de quietud en el momento de acostarnos a veces solemos pensar, que está pasando, no puedo ver noticias, no puedo salir tarde en la noche, ni muy temprano en la mañana sin sentir miedo, desprotección, angustia y cada uno de los sentimientos que surgen en el ser humano por culpa de la inseguridad…

Pero hoy te traigo buenas noticias, así como se preguntaba en ese programa tan visto por todos nosotros, a ti que hoy te preguntas lo mismo te digo, sí, tenemos quien nos defienda, es una promesa de nuestro Dios que no es hombre para mentir, ni hijo de hombre  para que se arrepienta. Hoy puedes confiar en la providencia divina, depositarte por completo en sus brazos de amor, e invitarle a que vaya contigo a donde quiera que te dirijas  hoy, invítalo, camina con El, Dios es fiel.

Comparte las buenas nuevas con tus amigos y conocidos, hay tanta gente necesitada de una palabra de aliento, de esperanza, no se la niegues. Cristo es nuestra amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones…


Feliz día y recuerda nuestro versículo de hoy Zacarías 12:8.

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Sea tu si, si y sea tu no, no.