martes, 4 de enero de 2022

Nuestro amparo y fortaleza.

 


En materia legal un amparo o recurso de amparo, es una acción que contemplan diversas Constituciones y que permite que una persona pueda recurrir a un alto tribunal cuando considera que sus derechos no fueron respetados o protegidos por otros tribunales.

Es justo a eso cuando se refiere el texto de Salmos 46, cuando trata de explicar que significa Dios o que debería significar, en nuestras vidas. Recurrir a Dios o ir a Dios mediante la oración, es el acto de amor, de sumisión, de humildad. de respeto incluso, más completo que puede practicar el hombre; ya que cuando hacemos esto, conscientes de lo que estamos haciendo, estamos declarando que Dios es ese alto tribunal donde hemos de recurrir para obtener respuesta que no hemos podido conseguir por otros medios o métodos, o de otras personas o maneras de hacer las cosas. 

Imaginemos por un momento que las montañas sean movidas de sus lugares y que se hundan en la profundidad de los mares, o que de repente las aguas del mar vengan sobre tierra firme y destruya todo lo hoy vemos como hermoso y moderno. No solamente da miedo el solo hecho de escribirlo, también pensarlo conscientemente hace que comencemos a reflexionar en nuestras acciones, o en las cosas que no hemos hecho, o en lo que no hemos dicho...y nos aterroriza que nuestro tiempo para hacer, decir o sentir, se nos pueda acortar o simplemente terminar.

Cuando la especie humana se siente amenazada, suele recurrir a un refugio, en busca de protección, primero física y luego emocional. Hoy te invito a que busques ese refugio, ese amparo, para que puedas recibir ayuda emocional y luego espiritual; Dios conforta los corazones, los alienta, los instruye y consuela, provocando una paz que solo se consigue a través de Él.

Dios es nuestro amparo y fortaleza,

Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.

 Por tanto, no temeremos, aunque la tierra sea removida,

Y se traspasen los montes al corazón del mar...(Salmos 46:1-2)

 

No temas, no dudes en buscarle. Hoy es el día perfecto para hacerlo; quizás no estás en problemas ni dificultades, ni nada te agobia o te atormenta; o por el contrario hoy estas triste o arrepentido por algo; yo sé que de todas formas o maneras, hoy y ahora es el mejor momento de buscarlo y encontrarle. 

Recuerda que Dios es bueno todo el tiempo, y que todo el tiempo Dios es bueno. Feliz y bendecido día.

 


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Sea tu si, si y sea tu no, no.