viernes, 27 de diciembre de 2019

¡Metas cumplidas! O ¿Metas cumplidas?




Hoy estoy haciendo un recorrido mental por la lista de propósitos que formule al finalizar el año 2018. Es interesante ver con cuanto entusiasmo somos capaces de redactar una  lista de propósitos bien formulada, la cual, estamos (en ese  momento) más que convencidos que vamos a cumplir, o por lo menos estamos más que dispuesto a hacer que suceda.

Y resulta interesante ver como la frase que dice (un viejo adagio) “el hombre propone y Dios dispone” se cumple en cada milésima de segundo de nuestras vidas. Somos capaces de proponer, pero somos incapaces (muchas veces) de hacer… comenzamos la dieta y la paramos porque nos cansamos, o porque hemos rebajado demasiado, o porque el presupuesto no nos alcanza, o porque nos enfermamos y necesitamos más vitaminas, etc, etc, etc…

Comenzamos a ahorrar porque necesitamos comprar un vehículo o cambiar el que tenemos, pero al final no pudimos comprar el que queríamos, quizás porque se presentó otra oportunidad, o porque la inflación nos jugó mal, o porque los intereses del Banco bajaron (para nuestros ahorros) o subieron (para los financiamientos), o por lo que quieras (hay tantas excusas)… tal vez nos propusimos tener relaciones más sanas de amistades, de familia, amorosas (la que quieras) y simplemente hoy hay personas que no están a nuestro lado, por nosotros mismos, por nuestra forma de pensar, de actuar, de hablar, que se yo…

Pero también es interesante ver como aquellas cosas que no eran prioridad, la hemos realizado, a veces hasta inconscientemente. Si, inconscientemente, hemos alcanzado lo que en nuestro subconsciente queríamos alcanzar, ¿recuerdas la frase que dice “querer es poder”?, pues es así, querer, definitivamente es poder.   Debe haber en nosotros el querer como el hacer…. Como dice la biblia; Es básico identificar en qué hemos centrado nuestras fuerzas, nuestros deseos, nuestros pensamientos positivos?; ha valido la pena?, he logrado lo que me propuse?, a qué estoy dispuesto a fin de realizar o alcanzar mi proyecto?, qué me hace falta para poder alcanzarlo?, qué hare con eso cuando lo alcance?, a quién ayudo o a quién dañaría, al alcanzar mi meta?, después de esa meta, cuál sería la siguiente?, que tiempo le emplearía a lograrlo?.... todas esas preguntas entre muchas otras más, debemos de formularnos antes de redactar la lista de propósitos para este año 2020.

No olvides que no vivimos solos y que en algún momento de nuestro trayecto por el nuevo año, necesitaremos de personas, incluso hasta de animales y cosas; Vivir en paz contigo mismo y con el prójimo debería ser nuestro primer propósito. Pero como cada cual es diferente y tiene gustos y prioridades diferentes, hoy solo te invito a que reflexiones en esto, y que cualquiera que sea tu lista, al terminar el año próximo, puedas decir, gracias Dios, lo planifique y lo logre porque tú me lo permitiste y me ayudaste.

No dejes que este año termine son meditar en tu lista del año 2018 y úsala como una herramienta útil y necesaria para la realización de tu próxima lista. Y que durante tu andar en el año venidero, puedas experimentar la paz y la compañía de nuestro Padre Celestial.

Te deseo un feliz fin de año 2019 y un venturoso y armonioso año 2020, lleno de metas y propósitos que te hagan ser, sobre todo, un mejor ser humano.

Dios te bendiga.

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