miércoles, 19 de diciembre de 2018

Mi padre me ama.


Juan 4:7-10 

7 Vino una mujer de Samaria a sacar agua; y Jesús le dijo: Dame de beber.

8 Pues sus discípulos habían ido a la ciudad a comprar de comer.

9 La mujer samaritana le dijo: ¿Cómo tú, siendo judío, me pides a mí de beber, que soy mujer samaritana? Porque judíos y samaritanos no se tratan entre sí.
10 Respondió Jesús y le dijo: Si conocieras el don de Dios, y quién es el que te dice: Dame de beber; tú le pedirías, y él te daría agua viva. (Te invito a leer la historia completa).


¿Conoces la historia de la mujer samaritana?

Dios nos ve con la misma claridad que vio a la mujer samaritana. Conoce nuestros pecados y heridas, y quiere perdonarnos y restaurarnos. Al aceptar su salvación y someternos a la obra transformadora del Espíritu Santo, tendremos la seguridad de su amor y de su cuidado por nosotros. Solo debemos confiar en su poder transformador y sanador.

Llénate de gozo, tu padre Celestial te ama.


Feliz y bendecido día. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario