Por
la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus
misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad. (Lamentaciones
3:22-23)
¿Crees
que estas todavía en este mundo por mera casualidad?
Nos dice la palabra de Dios, que, si estamos aquí todavía hoy, es porque Dios tiene
un propósito para nuestras vidas. No importa que tan desesperados, decepcionados,
intranquilos, acabados, menospreciados, vacíos, desanimados, o lo que sea, nos
podamos sentir hoy; Dios una vez más nos recuerda que por su misericordia
estamos vivos y disfrutando de las cosas que Él ha preparado para nosotros.
Dios,
cuando decidió raer de este mundo toda especie humana, vegetal y animal,
preservo una simiente para dar continuidad a su propósito de existencia humana
en este mundo por amor a su nombre; fue por su misericordia que Noé y su familia tuvieron la
oportunidad de llenar la tierra; fue por su misericordia que Jonás (aunque no quería
ir a Nínive) llego al lugar que había sido destinado para que el fuera a llevar
las buenas nuevas de salvación.
Fue
por su misericordia que Elías fue sustentado, preservado, y librado de las manos
de Jezabel; fue por su misericordia que Job fue restituido en todo, luego de
haber sido probada su fe; fue por su misericordia que Mefiboset fue restituido,
en su nombre, por David; fue por la misericordia de Dios que Mardoqueo procuro
el bienestar de su pueblo y hablo paz para todo su linaje (Ester 10:3).
Por
su misericordia, Moisés al ver cara a cara a Dios no murió; y es por su
misericordia que hoy yo estoy escribiendo estas líneas, y tú estás leyendo
estas meditaciones. Dios en su amor hoy nos ha regalado un día nuevo lleno de expectativas
y oportunidades, a los fines de que podamos ser felices; y que también podamos
compartir las grandes cosas que Dios ha hecho en nosotros.
Gracias
Dios por este día. Recuerda, Dios es bueno todo el tiempo. Dios te bendiga rica
y abundantemente.
